EXPEDICIONES

NOTA: Los pro­duc­tos que pro­ponemos a con­tin­uación no han sido idea­d­os para tur­is­tas reg­u­lares, sino para ver­daderos vi­a­jeros román­ti­cos dis­puestos a sat­is­fac­er su es­píritu aven­turero y an­sia de libertad.

¿Odias los ho­rar­ios y tien­des a evi­tar aglom­era­ciones? Cuan­do vi­a­jas, ¿sientes la necesi­dad de ir más allá de las ru­tas preestable­ci­das y pre­fieres de­jar tu guía de vi­a­jes en casa? De ser así, nues­tras ex­pe­di­ciones es­tán sin duda he­chas para ti.

Tay­tay es el es­ce­nario per­fec­to para la aven­tu­ra que bus­cas. Sim­ple­mente lo tiene todo: sel­va, la­gos, mon­tañas, manglares, ar­recifes de coral… así como un sin­fín de is­las de­sier­tas que harán las deli­cias de los náufra­gos de vo­cación. En Tay­tay la nat­u­raleza aún se con­ser­va en su es­ta­do orig­i­nal, aje­na al tur­is­mo de masas que ha ocu­pa­do otras zonas de Palawan, y puede ser dis­fru­ta­da por el vis­i­tante sin límites, en soledad y con to­tal privacidad.

Al unirte a nues­tras ex­pe­di­ciones es­tarás op­tan­do por la adren­a­li­na, la nat­u­raleza sal­va­je y la im­pro­visación. Es­tarás tam­bién eligien­do vivir una ex­pe­ri­en­cia real, autén­ti­ca, con la que la may­oría tan solo puede soñar, y que sin duda te acom­pañará el resto de tu vida.

Nuestras expediciones incluyen
  • SER­VI­CIO DE GUÍA

    el mejor con­se­jo, búsque­da y ori­entación garantizados

  • TRANS­PORTE

    des­de Tay­tay a los lu­gares de in­terés y viceversa

  • CO­MI­DA Y BEBIDA

    tres co­mi­das al día, más agua y be­bidas calientes ilim­i­tadas du­rante las ex­pe­di­ciones en barco

  • TASAS DE ENTRADA

    a los lu­gares de in­terés (p. ej. is­las pri­vadas), en caso de ser aplicables

  • MA­TE­R­I­AL DE ACAMPADA

    tien­das, col­chones hinch­ables y al­mo­hadas en ex­pe­di­ciones en bar­co, hamacas y mosquit­eras en ru­tas de senderismo

  • AC­CE­SO ILIM­I­TA­DO A

    ma­te­r­i­al de buceo y kayaks du­rante las ex­pe­di­ciones en barco

  • SE­GURI­DAD

    se­guro de nave­gación, kits de primeros aux­il­ios y ma­te­r­i­al de seguridad

  • CON­FORT

    asien­tos acolcha­dos, sombra…todo lo que nece­si­tas para dis­fru­tar de la nave­gación. Toal­las y es­carpines tam­bién disponibles a bordo.

EXPEDICIONES

NOTA: Los pro­duc­tos que pro­ponemos a con­tin­uación no han sido idea­d­os para tur­is­tas reg­u­lares, sino para ver­daderos vi­a­jeros román­ti­cos dis­puestos a sat­is­fac­er su es­píritu aven­turero y an­sia de libertad.

¿Odias los ho­rar­ios y tien­des a evi­tar aglom­era­ciones? Cuan­do vi­a­jas, ¿sientes la necesi­dad de ir más allá de las ru­tas preestable­ci­das y pre­fieres de­jar tu guía de vi­a­jes en casa? De ser así, nues­tras ex­pe­di­ciones es­tán sin duda he­chas para ti.

Tay­tay es el es­ce­nario per­fec­to para la aven­tu­ra que bus­cas. Sim­ple­mente lo tiene todo: sel­va, la­gos, mon­tañas, manglares, ar­recifes de coral… así como un sin­fín de is­las de­sier­tas que harán las deli­cias de los náufra­gos de vo­cación. En Tay­tay la nat­u­raleza aún se con­ser­va en su es­ta­do orig­i­nal, aje­na al tur­is­mo de masas que ha ocu­pa­do otras zonas de Palawan, y puede ser dis­fru­ta­da por el vis­i­tante sin límites, en soledad y con to­tal privacidad

Al unirte a nues­tras ex­pe­di­ciones es­tarás op­tan­do por la adren­a­li­na, la nat­u­raleza sal­va­je y la im­pro­visación. Es­tarás tam­bién eligien­do vivir una ex­pe­ri­en­cia real, autén­ti­ca, con la que la may­oría tan solo puede soñar, y que sin duda te acom­pañará el resto de tu vida.

Nuestras
expediciones
incluyen
  • SER­VI­CIO DE GUÍA

    el mejor con­se­jo, búsque­da y ori­entación garantizados

  • TRANS­PORTE

    des­de Tay­tay a los lu­gares de in­terés y viceversa

  • CO­MI­DA Y BEBIDA

    tres co­mi­das al día, más agua y be­bidas calientes ilim­i­tadas du­rante las ex­pe­di­ciones en barco

  • TASAS DE ENTRADA

    a los lu­gares de in­terés (p. ej. is­las pri­vadas), en caso de ser aplicables

  • MA­TE­R­I­AL DE ACAMPADA

    tien­das, col­chones hinch­ables y al­mo­hadas en ex­pe­di­ciones en bar­co, hamacas y mosquit­eras en ru­tas de senderismo

  • AC­CE­SO ILIM­I­TA­DO A

    ma­te­r­i­al de buceo y kayaks du­rante las ex­pe­di­ciones en barco

  • SE­GURI­DAD

    se­guro de nave­gación, kits de primeros aux­il­ios y ma­te­r­i­al de seguridad

  • CON­FORT

    asien­tos acolcha­dos, sombra…todo lo que nece­si­tas para dis­fru­tar de la nave­gación. Toal­las y es­carpines tam­bién disponibles a bordo.

EXPEDICIONES

NOTA: Los pro­duc­tos que pro­ponemos a con­tin­uación no han sido idea­d­os para tur­is­tas reg­u­lares, sino para ver­daderos vi­a­jeros román­ti­cos dis­puestos a sat­is­fac­er su es­píritu aven­turero y an­sia de libertad.

¿Odias los ho­rar­ios y tien­des a evi­tar aglom­era­ciones? Cuan­do vi­a­jas, ¿sientes la necesi­dad de ir más allá de las ru­tas preestable­ci­das y pre­fieres de­jar tu guía de vi­a­jes en casa? De ser así, nues­tras ex­pe­di­ciones es­tán sin duda he­chas para ti.

Tay­tay es el es­ce­nario per­fec­to para la aven­tu­ra que bus­cas. Sim­ple­mente lo tiene todo: sel­va, la­gos, mon­tañas, manglares, ar­recifes de coral… así como un sin­fín de is­las de­sier­tas que harán las deli­cias de los náufra­gos de vo­cación. En Tay­tay la nat­u­raleza aún se con­ser­va en su es­ta­do orig­i­nal, aje­na al tur­is­mo de masas que ha ocu­pa­do otras zonas de Palawan, y puede ser dis­fru­ta­da por el vis­i­tante sin límites, en soledad y con to­tal privacidad.

Al unirte a nues­tras ex­pe­di­ciones es­tarás op­tan­do por la adren­a­li­na, la nat­u­raleza sal­va­je y la im­pro­visación. Es­tarás tam­bién eligien­do vivir una ex­pe­ri­en­cia real, autén­ti­ca, con la que la may­oría tan solo puede soñar, y que sin duda te acom­pañará el resto de tu vida.

Nuestras expediciones incluyen
  • SER­VI­CIO DE GUÍA

    el mejor con­se­jo, búsque­da y ori­entación garantizados

  • TRANS­PORTE

    des­de Tay­tay a los lu­gares de in­terés y viceversa

  • CO­MI­DA Y BEBIDA

    tres co­mi­das al día, más agua y be­bidas calientes ilim­i­tadas du­rante las ex­pe­di­ciones en barco

  • TASAS DE ENTRADA

    a los lu­gares de in­terés (p. ej. is­las pri­vadas), en caso de ser aplicables

  • MA­TE­R­I­AL DE ACAMPADA

    tien­das, col­chones hinch­ables y al­mo­hadas en ex­pe­di­ciones en bar­co, hamacas y mosquit­eras en ru­tas de senderismo

  • AC­CE­SO ILIM­I­TA­DO A

    ma­te­r­i­al de buceo y kayaks du­rante las ex­pe­di­ciones en barco

  • SE­GURI­DAD

    se­guro de nave­gación, kits de primeros aux­il­ios y ma­te­r­i­al de seguridad

  • CON­FORT

    asien­tos acolcha­dos, sombra…todo lo que nece­si­tas para dis­fru­tar de la nave­gación. Toal­las y es­carpines tam­bién disponibles a bordo.

#1 LINAPACAN:

Un paraí­so de náufragos

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    baja

  • Desta­ca­do:
    • Is­las desiertas
    • Playas de are­na blanca
    • Ar­recifes y vida marina
    • Manglares
    • Sen­sación de libertad
  • Du­ración:

    4 dias / 3 noches

  • Niños:

    to­das las edades, bajo supervisión

  • Peli­gros y molestias:
    • Je­jenes (fle­bót­mos)
    • Sol y deshidratación
    • Mare­os
    • Medusas y fau­na venenosa
    • Cor­ri­entes marinas

Lina­pacan and its satel­lite is­lands are an un­ex­plored trop­i­cal par­adise which could well be re­gard­ed as the ac­tu­al last fron­tier of the Philip­pines. Away from the crowds of mass tourism, life in Lina­pacan is still as it has al­ways been, beau­ti­ful­ly qui­et and sim­ple, and this is pre­cise­ly its main attraction.

Join our most ex­clu­sive ex­pe­di­tion and let your­self lose track of time among co­conut grooves, white sand beach­es & coral reefs.

This amaz­ing ad­ven­ture will start with a cool­ing plunge in the se­cret la­goon of Ele­phant Is­land, where first class snorkelling is pos­si­ble. A bar­be­cue-style lunch on its white sand beach, to the shade of im­pos­si­ble lime­stone cliffs, will lead us to our next des­ti­na­tion of the day: Nabat Is­land. Nabat will of­fer more snorkelling op­por­tu­ni­ties and there, sea con­di­tions per­mit­ting, we will be able to vis­it to an­oth­er hid­den la­goon. Af­ter about one hour of nav­i­ga­tion we will fi­nal­ly reach our first camp­ing site in a desert is­land of Iloc arch­i­pel­ago.

On the sec­ond day, we will have a pleas­ant awak­en­ing on a dream desert beach, in the mid­dle of nowhere. We will nonethe­less leave ear­ly to make some is­land-hop­ping in the sur­round­ings and will lat­er trav­el fur­ther north­ward in or­der to reach the Lina­pacan arch­i­pel­ago by lunch time. In there, we will set what will be our camp­ing site for the fol­low­ing two nights, and our head­quar­ters for fur­ther ex­plo­ration across the is­lands. The af­ter­noon of the sec­ond day will pass by peace­ful­ly in our new home, as we en­joy end­less hours of bask­ing, swim­ming, and snorkelling. Kayak­ing will def­i­nite­ly be the choice for the most ad­ven­tur­ous travellers.

The third day will be a day for ei­ther re­lax or more is­land-hop­ping ex­plo­ration, at the cus­tomers’ choice. Lina­pacan is full of beau­ti­ful is­lands and all of them are def­i­nite­ly worth a vis­it. Stay­ing in our camp­ing is­land, though,  will also be a good op­tion, as this is just as beau­ti­ful and en­ter­tain­ing as the others.

Un­for­tu­nate­ly noth­ing lasts for­ev­er, and the time for our de­par­ture will fi­nal­ly ar­rive on the morn­ing of the fourth day. We will def­i­nite­ly have a tough time leav­ing our dream is­land be­hind, but the ex­cite­ment of hav­ing more ad­ven­tures ahead will serve to com­fort us. The wild beau­ty of Tamisan man­groves will await. This flood­ed for­est, with its whim­si­cal­ly root­ed trees and colour­ful king­fish­ers, will be the ic­ing on the cake of such a life­time experience.

#1 LINAPACAN:

Un paraí­so de náufragos

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    baja

  • Desta­ca­do:
    • Is­las desiertas
    • Playas de are­na blanca
    • Ar­recifes y vida marina
    • Manglares
    • Sen­sación de libertad
  • Du­ración

    4 dias / 3 noches

  • Niños

    to­das las edades, bajo supervisión

  • Peli­gros y molestias:
    • Je­jenes (fle­bót­mos)
    • Sol y deshidratación
    • Mare­os
    • Medusas y fau­na venenosa
    • Cor­ri­entes marinas

Lina­pacan and its satel­lite is­lands are an un­ex­plored trop­i­cal par­adise which could well be re­gard­ed as the ac­tu­al last fron­tier of the Philip­pines. Away from the crowds of mass tourism, life in Lina­pacan is still as it has al­ways been, beau­ti­ful­ly qui­et and sim­ple, and this is pre­cise­ly its main attraction.

Join our most ex­clu­sive ex­pe­di­tion and let your­self lose track of time among co­conut grooves, white sand beach­es & coral reefs.

This amaz­ing ad­ven­ture will start with a cool­ing plunge in the se­cret la­goon of Ele­phant Is­land, where first class snorkelling is pos­si­ble. A bar­be­cue-style lunch on its white sand beach, to the shade of im­pos­si­ble lime­stone cliffs, will lead us to our next des­ti­na­tion of the day: Nabat Is­land. Nabat will of­fer more snorkelling op­por­tu­ni­ties and there, sea con­di­tions per­mit­ting, we will be able to vis­it to an­oth­er hid­den la­goon. Af­ter about one hour of nav­i­ga­tion we will fi­nal­ly reach our first camp­ing site in a desert is­land of Iloc arch­i­pel­ago.

On the sec­ond day, we will have a pleas­ant awak­en­ing on a dream desert beach, in the mid­dle of nowhere. We will nonethe­less leave ear­ly to make some is­land-hop­ping in the sur­round­ings and will lat­er trav­el fur­ther north­ward in or­der to reach the Lina­pacan arch­i­pel­ago by lunch time. In there, we will set what will be our camp­ing site for the fol­low­ing two nights, and our head­quar­ters for fur­ther ex­plo­ration across the is­lands. The af­ter­noon of the sec­ond day will pass by peace­ful­ly in our new home, as we en­joy end­less hours of bask­ing, swim­ming, and snorkelling. Kayak­ing will def­i­nite­ly be the choice for the most ad­ven­tur­ous travellers.

The third day will be a day for ei­ther re­lax or more is­land-hop­ping ex­plo­ration, at the cus­tomers’ choice. Lina­pacan is full of beau­ti­ful is­lands and all of them are def­i­nite­ly worth a vis­it. Stay­ing in our camp­ing is­land, though,  will also be a good op­tion, as this is just as beau­ti­ful and en­ter­tain­ing as the others.

Un­for­tu­nate­ly noth­ing lasts for­ev­er, and the time for our de­par­ture will fi­nal­ly ar­rive on the morn­ing of the fourth day. We will def­i­nite­ly have a tough time leav­ing our dream is­land be­hind, but the ex­cite­ment of hav­ing more ad­ven­tures ahead will serve to com­fort us. The wild beau­ty of Tamisan man­groves will await. This flood­ed for­est, with its whim­si­cal­ly root­ed trees and colour­ful king­fish­ers, will be the ic­ing on the cake of such a life­time experience.

#1 LINAPACAN:

Un paraí­so de náufragos

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    baja

  • Desta­ca­do:
    • Is­las desiertas
    • Playas de are­na blanca
    • Ar­recifes y vida marina
    • Manglares
    • Sen­sación de libertad
  • Du­ración

    4 dias / 3 noches

  • Niños

    to­das las edades, bajo supervisión

  • Peli­gros y molestias:
    • Je­jenes (fle­bót­mos)
    • Sol y deshidratación
    • Mare­os
    • Medusas y fau­na venenosa
    • Cor­ri­entes marinas

Lina­pacan and its satel­lite is­lands are an un­ex­plored trop­i­cal par­adise which could well be re­gard­ed as the ac­tu­al last fron­tier of the Philip­pines. Away from the crowds of mass tourism, life in Lina­pacan is still as it has al­ways been, beau­ti­ful­ly qui­et and sim­ple, and this is pre­cise­ly its main attraction.

Join our most ex­clu­sive ex­pe­di­tion and let your­self lose track of time among co­conut grooves, white sand beach­es & coral reefs.

This amaz­ing ad­ven­ture will start with a cool­ing plunge in the se­cret la­goon of Ele­phant Is­land, where first class snorkelling is pos­si­ble. A bar­be­cue-style lunch on its white sand beach, to the shade of im­pos­si­ble lime­stone cliffs, will lead us to our next des­ti­na­tion of the day: Nabat Is­land. Nabat will of­fer more snorkelling op­por­tu­ni­ties and there, sea con­di­tions per­mit­ting, we will be able to vis­it to an­oth­er hid­den la­goon. Af­ter about one hour of nav­i­ga­tion we will fi­nal­ly reach our first camp­ing site in a desert is­land of Iloc arch­i­pel­ago.

On the sec­ond day, we will have a pleas­ant awak­en­ing on a dream desert beach, in the mid­dle of nowhere. We will nonethe­less leave ear­ly to make some is­land-hop­ping in the sur­round­ings and will lat­er trav­el fur­ther north­ward in or­der to reach the Lina­pacan arch­i­pel­ago by lunch time. In there, we will set what will be our camp­ing site for the fol­low­ing two nights, and our head­quar­ters for fur­ther ex­plo­ration across the is­lands. The af­ter­noon of the sec­ond day will pass by peace­ful­ly in our new home, as we en­joy end­less hours of bask­ing, swim­ming, and snorkelling. Kayak­ing will def­i­nite­ly be the choice for the most ad­ven­tur­ous travellers.

The third day will be a day for ei­ther re­lax or more is­land-hop­ping ex­plo­ration, at the cus­tomers’ choice. Lina­pacan is full of beau­ti­ful is­lands and all of them are def­i­nite­ly worth a vis­it. Stay­ing in our camp­ing is­land, though,  will also be a good op­tion, as this is just as beau­ti­ful and en­ter­tain­ing as the others.

Un­for­tu­nate­ly noth­ing lasts for­ev­er, and the time for our de­par­ture will fi­nal­ly ar­rive on the morn­ing of the fourth day. We will def­i­nite­ly have a tough time leav­ing our dream is­land be­hind, but the ex­cite­ment of hav­ing more ad­ven­tures ahead will serve to com­fort us. The wild beau­ty of Tamisan man­groves will await. This flood­ed for­est, with its whim­si­cal­ly root­ed trees and colour­ful king­fish­ers, will be the ic­ing on the cake of such a life­time experience.

#2 ILOC:

Un peda­zo de cielo en la tierra

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    baja

  • Desta­ca­do:
    • Is­las desiertas
    • Playas de are­na blanca
    • Ar­recifes y vida marina
    • Acan­ti­la­dos y lagunas
    • Manglares
  • Du­ración:

    2 días / 1 noche

  • Niños:

    to­das las edades, bajo supervisión

  • Peli­gros y molestias:
    • Je­jenes (fle­bó­to­mos)
    • Sol y deshidratación
    • Mare­os
    • Medusas y fau­na venenosa
    • Cor­ri­entes marinas

If you are short of time or bud­get and yet you don’t want to give up to par­adise, you may want to opt for this short­er, bud­get ver­sion of the pre­vi­ous expedition.

The is­lands of Iloc group are in­deed as beau­ti­ful and en­joy­able as those of Lina­pacan, al­though they are lo­cat­ed much clos­er to Tay­tay. White sand and the ex­pe­ri­ence of camp­ing in a desert is­land are equal­ly avail­able in Iloc.

As it could­n’t be oth­er­wise, this trip will have in Pa­bel­lon Is­lands its best pos­si­ble start­ing point. In Ele­phant Is­land, the most promi­nent of the twin mono­liths, we will be able to vis­it a hid­den la­goon and en­joy snorkelling on a first-class fring­ing coral reef. We will then head to Nabat Is­land, a tru­ly un­in­hab­it­ed islet with fan­cy lime­stone walls and white sand creeks, which is bet­ter ex­plored by kayak. We will leave Nabat by mid-af­ter­noon, with time enough to ad­dress the hour of nav­i­ga­tion sep­a­rat­ing us from our camp­ing site in Iloc arch­i­pel­ago. Upon ar­rival:  camp­fire sto­ries on the beach, shoot­ing stars, and fire­flies.

And then you wake up on a dream white sand beach on the tip of a trop­i­cal is­land, in the mid­dle of nowhere. You are sur­round­ed by a lush rain­for­est and co­conut trees, and your walk over the sand is only dis­rupt­ed by shells and a few creep­ing vines with beau­ti­ful­ly coloured flow­ers. Def­i­nite­ly there is no­body around, only the song of ex­ot­ic birds breaks the si­lence. This is just about you and the is­land.

Still re­cov­er­ing from such an awak­en­ing, we will hop into an­oth­er is­land for a quick “good­bye” plunge, as from this point we will al­ready turn south­wards head­ing back to Tay­tay Bay. But a last ad­ven­ture will await in Tamisan man­groves, where we will un­der­take some kayak ex­plo­ration in search of wildlife.

#2 ILOC:

Un peda­zo de cielo en la tierra

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    baja

  • Desta­ca­do:
    • Is­las desiertas
    • Playas de are­na blanca
    • Ar­recifes y vida marina
    • Acan­ti­la­dos y lagunas
    • Manglares
  • Du­ración

    2 días / 1 noche

  • Niños

    to­das las edades, bajo supervisión

  • Peli­gros y molestias:
    • Je­jenes (fle­bó­to­mos)
    • Sol y deshidratación
    • Mare­os
    • Medusas y fau­na venenosa
    • Cor­ri­entes marinas

If you are short of time or bud­get and yet you don’t want to give up to par­adise, you may want to opt for this short­er, bud­get ver­sion of the pre­vi­ous expedition.

The is­lands of Iloc group are in­deed as beau­ti­ful and en­joy­able as those of Lina­pacan, al­though they are lo­cat­ed much clos­er to Tay­tay. White sand and the ex­pe­ri­ence of camp­ing in a desert is­land are equal­ly avail­able in Iloc.

As it could­n’t be oth­er­wise, this trip will have in Pa­bel­lon Is­lands its best pos­si­ble start­ing point. In Ele­phant Is­land, the most promi­nent of the twin mono­liths, we will be able to vis­it a hid­den la­goon and en­joy snorkelling on a first-class fring­ing coral reef. We will then head to Nabat Is­land, a tru­ly un­in­hab­it­ed islet with fan­cy lime­stone walls and white sand creeks, which is bet­ter ex­plored by kayak. We will leave Nabat by mid-af­ter­noon, with time enough to ad­dress the hour of nav­i­ga­tion sep­a­rat­ing us from our camp­ing site in Iloc arch­i­pel­ago. Upon ar­rival:  camp­fire sto­ries on the beach, shoot­ing stars, and fire­flies.

And then you wake up on a dream white sand beach on the tip of a trop­i­cal is­land, in the mid­dle of nowhere. You are sur­round­ed by a lush rain­for­est and co­conut trees, and your walk over the sand is only dis­rupt­ed by shells and a few creep­ing vines with beau­ti­ful­ly coloured flow­ers. Def­i­nite­ly there is no­body around, only the song of ex­ot­ic birds breaks the si­lence. This is just about you and the is­land.

Still re­cov­er­ing from such an awak­en­ing, we will hop into an­oth­er is­land for a quick “good­bye” plunge, as from this point we will al­ready turn south­wards head­ing back to Tay­tay Bay. But a last ad­ven­ture will await in Tamisan man­groves, where we will un­der­take some kayak ex­plo­ration in search of wildlife.

#2 ILOC:

Un peda­zo de cielo en la tierra

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    baja

  • Desta­ca­do:
    • Is­las desiertas
    • Playas de are­na blanca
    • Ar­recifes y vida marina
    • Acan­ti­la­dos y lagunas
    • Manglares
  • Du­ración

    2 días / 1 noche

  • Niños

    to­das las edades, bajo supervisión

  • Peli­gros y molestias:
    • Je­jenes (fle­bó­to­mos)
    • Sol y deshidratación
    • Mare­os
    • Medusas y fau­na venenosa
    • Cor­ri­entes marinas

If you are short of time or bud­get and yet you don’t want to give up to par­adise, you may want to opt for this short­er, bud­get ver­sion of the pre­vi­ous expedition.

The is­lands of Iloc group are in­deed as beau­ti­ful and en­joy­able as those of Lina­pacan, al­though they are lo­cat­ed much clos­er to Tay­tay. White sand and the ex­pe­ri­ence of camp­ing in a desert is­land are equal­ly avail­able in Iloc.

As it could­n’t be oth­er­wise, this trip will have in Pa­bel­lon Is­lands its best pos­si­ble start­ing point. In Ele­phant Is­land, the most promi­nent of the twin mono­liths, we will be able to vis­it a hid­den la­goon and en­joy snorkelling on a first-class fring­ing coral reef. We will then head to Nabat Is­land, a tru­ly un­in­hab­it­ed islet with fan­cy lime­stone walls and white sand creeks, which is bet­ter ex­plored by kayak. We will leave Nabat by mid-af­ter­noon, with time enough to ad­dress the hour of nav­i­ga­tion sep­a­rat­ing us from our camp­ing site in Iloc arch­i­pel­ago. Upon ar­rival:  camp­fire sto­ries on the beach, shoot­ing stars, and fire­flies.

And then you wake up on a dream white sand beach on the tip of a trop­i­cal is­land, in the mid­dle of nowhere. You are sur­round­ed by a lush rain­for­est and co­conut trees, and your walk over the sand is only dis­rupt­ed by shells and a few creep­ing vines with beau­ti­ful­ly coloured flow­ers. Def­i­nite­ly there is no­body around, only the song of ex­ot­ic birds breaks the si­lence. This is just about you and the is­land.

Still re­cov­er­ing from such an awak­en­ing, we will hop into an­oth­er is­land for a quick “good­bye” plunge, as from this point we will al­ready turn south­wards head­ing back to Tay­tay Bay. But a last ad­ven­ture will await in Tamisan man­groves, where we will un­der­take some kayak ex­plo­ration in search of wildlife.

#3 LUCES DEL MANGLAR

Donde la sel­va se une al mar

  • Tipo de expedición:

    kayak

  • Di­fi­cul­tad:

    me­dia-baja

  • Desta­ca­do:
    • Corte­jo de las luciérnagas
    • Fau­na
    • Paisajes
    • Sen­sación de aventura
  • Du­ración:

    2 días / 1 noche

  • Niños:

    de me­di­ana edad en adelante

  • Peli­gros y molestias:
    • Mos­qui­tos y je­jenes (fle­bó­to­mos)
    • Fau­na venenosa
    • Ex­travíos
    • Sol y deshidratación

The beau­ty of Palawan goes be­yond its white sand beach­es and this ex­pe­di­tion is def­i­nite­ly the proof. We pro­pose you ex­plor­ing one of the its largest and best pre­served man­grove forests, and go in search of its most mag­i­cal in­hab­i­tants: the man­grove fireflies.

This ad­ven­ture, though, would not be com­plete with­out do­ing some is­land-hop­ping. We will thus be­gin our trip by vis­it­ing Ele­phant Is­land, where we will be able to en­joy snor­kel­ing and cool up a bit on its hid­den la­goon. We will also have the time to chill out on its beau­ti­ful white sand beach, and pre­pare some grilled dish­es for our lunch. In the af­ter­noon we will head our main des­ti­na­tion in Tamisan man­groves. Our first con­tact with the for­est will be a qui­et but ex­cit­ing ride up­stream along Tamisan riv­er, still on our pas­sen­ger boat. From a com­fort­able po­si­tion, we will cer­tain­ly have good op­por­tu­ni­ties to spot lo­cal wildlife, while feel­ing some­what like old-time Ama­zon explorers.

We will soon reach our moor­ing site deep into the flood­ed for­est. Be­cause man­grove soils are not suit­able for camp­ing, the boat it­self will serve as base­camp for overnight and fur­ther ex­plo­ration. We will sim­ply sleep on the boat deck, but airbeds and shade roofs will en­sure our com­fort for the rest of the night.

Upon ar­rival and be­fore dusk we will take sev­er­al hours to ex­plore the sur­round­ing man­grove. Kayaks will al­low us to move smooth­ly through the tan­gle of roots and ap­proach wild an­i­mals. Long-tailed macaques, fish ea­gles and king­fish­ers will def­i­nite­ly be on our list. At night, a co­pi­ous din­ner and tons of sto­ries will di­rect­ly dri­ve us to the fire­fly time.

#3 LUCES DEL MANGLAR

Donde la sel­va se une al mar

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    me­dia-baja

  • Desta­ca­do:
    • Corte­jo de las luciérnagas
    • Fau­na
    • Paisajes
    • Sen­sación de aventura
  • Du­ración

    2 días / 1 noche

  • Niños

    de me­di­ana edad en adelante

  • Peli­gros y molestias:
    • Mos­qui­tos y je­jenes (fle­bó­to­mos)
    • Fau­na venenosa
    • Ex­travíos
    • Sol y deshidratación

The beau­ty of Palawan goes be­yond its white sand beach­es and this ex­pe­di­tion is def­i­nite­ly the proof. We pro­pose you ex­plor­ing one of the its largest and best pre­served man­grove forests, and go in search of its most mag­i­cal in­hab­i­tants: the man­grove fireflies.

This ad­ven­ture, though, would not be com­plete with­out do­ing some is­land-hop­ping. We will thus be­gin our trip by vis­it­ing Ele­phant Is­land, where we will be able to en­joy snor­kel­ing and cool up a bit on its hid­den la­goon. We will also have the time to chill out on its beau­ti­ful white sand beach, and pre­pare some grilled dish­es for our lunch. In the af­ter­noon we will head our main des­ti­na­tion in Tamisan man­groves. Our first con­tact with the for­est will be a qui­et but ex­cit­ing ride up­stream along Tamisan riv­er, still on our pas­sen­ger boat. From a com­fort­able po­si­tion, we will cer­tain­ly have good op­por­tu­ni­ties to spot lo­cal wildlife, while feel­ing some­what like old-time Ama­zon explorers.

We will soon reach our moor­ing site deep into the flood­ed for­est. Be­cause man­grove soils are not suit­able for camp­ing, the boat it­self will serve as base­camp for overnight and fur­ther ex­plo­ration. We will sim­ply sleep on the boat deck, but airbeds and shade roofs will en­sure our com­fort for the rest of the night.

Upon ar­rival and be­fore dusk we will take sev­er­al hours to ex­plore the sur­round­ing man­grove. Kayaks will al­low us to move smooth­ly through the tan­gle of roots and ap­proach wild an­i­mals. Long-tailed macaques, fish ea­gles and king­fish­ers will def­i­nite­ly be on our list. At night, a co­pi­ous din­ner and tons of sto­ries will di­rect­ly dri­ve us to the fire­fly time.

#3 LUCES DEL MANGLAR

Donde la sel­va se une al mar

  • Tipo de expedición:

    nave­gación

  • Di­fi­cul­tad:

    me­dia-baja

  • Desta­ca­do:
    • Corte­jo de las luciérnagas
    • Fau­na
    • Paisajes
    • Sen­sación de aventura
  • Du­ración

    2 días / 1 noche

  • Niños

    de me­di­ana edad en adelante

  • Peli­gros y molestias:
    • Mos­qui­tos y je­jenes (fle­bó­to­mos)
    • Fau­na venenosa
    • Ex­travíos
    • Sol y deshidratación

The beau­ty of Palawan goes be­yond its white sand beach­es and this ex­pe­di­tion is def­i­nite­ly the proof. We pro­pose you ex­plor­ing one of the its largest and best pre­served man­grove forests, and go in search of its most mag­i­cal in­hab­i­tants: the man­grove fireflies.

This ad­ven­ture, though, would not be com­plete with­out do­ing some is­land-hop­ping. We will thus be­gin our trip by vis­it­ing Ele­phant Is­land, where we will be able to en­joy snor­kel­ing and cool up a bit on its hid­den la­goon. We will also have the time to chill out on its beau­ti­ful white sand beach, and pre­pare some grilled dish­es for our lunch. In the af­ter­noon we will head our main des­ti­na­tion in Tamisan man­groves. Our first con­tact with the for­est will be a qui­et but ex­cit­ing ride up­stream along Tamisan riv­er, still on our pas­sen­ger boat. From a com­fort­able po­si­tion, we will cer­tain­ly have good op­por­tu­ni­ties to spot lo­cal wildlife, while feel­ing some­what like old-time Ama­zon explorers.

We will soon reach our moor­ing site deep into the flood­ed for­est. Be­cause man­grove soils are not suit­able for camp­ing, the boat it­self will serve as base­camp for overnight and fur­ther ex­plo­ration. We will sim­ply sleep on the boat deck, but airbeds and shade roofs will en­sure our com­fort for the rest of the night.

Upon ar­rival and be­fore dusk we will take sev­er­al hours to ex­plore the sur­round­ing man­grove. Kayaks will al­low us to move smooth­ly through the tan­gle of roots and ap­proach wild an­i­mals. Long-tailed macaques, fish ea­gles and king­fish­ers will def­i­nite­ly be on our list. At night, a co­pi­ous din­ner and tons of sto­ries will di­rect­ly dri­ve us to the fire­fly time.

Tarifas

(por per­sona)

  • 2 pers..
  • #1
    ISLAS
    LINAPACAN

  • #2
    ISLAS
    ILOC
  • #3
    LUCES DEL
    MANGLAR
  • 2 pers..
  • $481
    ₱26,900
    454 €
  • $231
    ₱12,900
    218 €
  • $159
    ₱8,900
    150 €
  • 3 pers.
  • $349
    ₱19,500
    329 €
  • $164
    ₱9,200
    155 €
  • $116
    ₱6,500
    110 €
  • 4 pers.
  • $284
    ₱15,900
    268 €
  • $136
    ₱7,600
    128 €
  • $97
    ₱5,400
    91 €
  • 5 pers.
  • $249
    ₱13,900
    235 €
  • $120
    ₱6,700
    113 €
  • $84
    ₱4,700
    79 €
  • 6 pers.
  • $231
    ₱12,900
    218 €
  • $107
    ₱6,000
    101 €
  • $77
    ₱4,300
    73 €
  • 7 pers.
  • $213
    ₱11,900
    201 €
  • $100
    ₱5,600
    95 €
  • $72
    ₱4,000

    68 €
  • 8 pers.
  • $198
    ₱11,100
    187 €
  • $93
    ₱5,200
    88 €
  • $66
    ₱3,700
    62 €
  • 9 o más
  • $184
    ₱10,300
    174 €
  • $86
    ₱4,800
    81 €
  • Pro­duc­to
    no
    disponible

Se acep­tan vi­a­jeros en soli­tario, siem­pre que abo­nen la tar­i­fa to­tal para dos per­sonas, por ser éste el mín­i­mo nece­sario para cubrir los costes operativos.
Las tar­i­fas en PHP (₱) pri­marán so­bre el resto. Los pre­cios en USD ($) y euro (€) son mera­mente ori­en­ta­tivos y po­drán vari­ar en fun­ción de la tasa de cam­bio en vig­or. Los pa­gos en efec­ti­vo en di­visa ex­tran­jera con­ll­e­varán un re­car­go del 5%.

 

Aceptamos pagos en DIVISA EXTRANJERA!

Flags

원 Won SURCOREANO (₩)

Flag-korea

新臺幣 Nuevo Dólar TAIWANËS (NT$)

Flag-taiwan

港幣 Dólar de HONG KONG (HK$)

Flag-hongkong

Dólar de SINGAPUR (S$)

Flag-singapore

円 Yen JAPONÉS (¥)

Flag-japan

EURO (€)

Flag-europe

Dólar AMERICANO (US$)

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שֶׁקֶל חָדָשׁ Nuevo Shekel ISRAELÍ (₪)

Flag-israel

 

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שֶׁקֶל חָדָשׁ Nuevo Shekel ISRAELÍ (₪)

Flag-israel

Términos y condiciones
  • METEOROLOGÍA Y SEGURIDAD

    La me­te­o­rología y la se­guri­dad son cues­tiones pri­mor­diales a la hora de re­alizar ac­tivi­dades al aire li­bre. La em­pre­sa es­tará oblig­a­da a in­for­mar al cliente tan­to de las condi­ciones me­te­o­rológ­i­cas es­per­adas el día de la ac­tivi­dad como de los peli­gros y mo­les­tias a los que éste pue­da verse ex­puesto du­rante su re­al­ización. De igual modo, el cliente de­jará con­stan­cia por es­crito de su conocimien­to, y de la asun­ción vol­un­taria del ries­go de­riva­do de los mis­mos, al tiem­po que ex­imirá a la em­pre­sa de toda re­spon­s­abil­i­dad en caso de ac­ci­dente no atribuible a neg­li­gen­cia o mala prax­is. En tan­to dicha in­for­ma­ción sea pues­ta a dis­posi­ción de los clientes de for­ma públi­ca y no­to­ria, in­de­pen­di­en­te­mente de cuál fuere la vía, el abono de cualquier can­ti­dad en relación con la con­trat­ación de los ser­vi­cios será tam­bién con­sid­er­a­do como una prue­ba de con­formi­dad por parte del cliente.

    Du­rante la nave­gación marí­ti­ma o la re­al­ización de ac­tivi­dades que guarden relación con ella, el capitán ten­drá siem­pre la úl­ti­ma pal­abra en ma­te­ria de plan­i­fi­cación y seguridad.

  • CAPACIDAD

    Las ac­tivi­dades que re­quier­an nave­gación marí­ti­ma ten­drán un límite de 12 par­tic­i­pantes, por ser ésta la ca­paci­dad máx­i­ma au­tor­iza­da de nue­stro bar­co de pasajeros. Cuan­do sea nece­sario per­noc­tar en el bar­co (e.g., en el manglar), po­drá ser aco­moda­do a bor­do un máx­i­mo de 8 pasajeros.

  • VIAJES COMPARTIDOS

    Com­par­tir el bar­co con otros vi­a­jeros no sólo es posi­ble, sino tam­bién, des­de nue­stro pun­to de vista, la op­ción más re­comend­able. Al com­par­tir con­seguirás abaratar tu tar­i­fa por per­sona, cono­cerás gente con la que ten­drás mu­cho en común y crearás un am­bi­ente mu­cho más ameno y agrad­able a bor­do. Si ya habías reser­va­do o eres el primero en con­tratar nue­stros ser­vi­cios, ten­drás pri­or­i­dad en el uso ex­clu­si­vo de nue­stro bar­co. Pero de­jare­mos siem­pre la puer­ta abier­ta a la in­cor­po­ración de úl­ti­ma hora de nuevos vi­a­jeros, en la que tú ten­drás siem­pre la úl­ti­ma pal­abra. Si ac­cedes a com­par­tir, al pro­ducirse un cam­bio en el número to­tal de pasajeros, te de­volver­e­mos la difer­en­cia en­tre la tar­i­fa que hu­bieras abona­do ini­cial­mente y la nue­va tar­i­fa que sea de aplicación.

  • HORA DE INICIO Y DURACIÓN

    El bar­co suele zarpar del puer­to de Tay­tay en­tre las 7 y las 8 de la mañana. So­mos, sin em­bar­go, bas­tante flex­i­bles en cuan­to al ho­rario y podemos or­ga­ni­zar la sal­i­da en otras fran­jas ho­rarias. La hora de re­gre­so de­pen­derá del pro­duc­to contratado.

  • COMIDA Y BEBIDA

    La tar­i­fa bási­ca para los itin­er­ar­ios de un día de du­ración incluirá:

    • Ac­ce­so ilim­i­ta­do a agua y be­bidas calientes du­rante todo el recorrido
    • 3 co­mi­das al día, que serán servi­das du­rante la nave­gación o aprovechan­do al­gu­na de las paradas
  • SERVICIOS INCLUIDOS

    Con la tar­i­fa bási­ca además se po­drá dis­fru­tar de:

    • SER­VI­CIO DE GUÍA
    • MA­TE­R­I­AL DE BUCEO Y KAYAKS (ilim­i­ta­do). TOAL­LAS Y ES­CARPINES.
    • MA­TE­R­I­AL DE ACAM­PA­DA (tien­das de cam­paña, col­chone­tas hinch­ables, al­mo­hadas, sábanas, linternas…)
    • TAR­I­FA DE ACCESO/TASA MEDIOAM­BI­EN­TAL, en su caso (e.g. is­las pri­vadas, ar­eas protegidas…)
    • SE­GURO DE NAVE­GACIÓN, KITS DE PRIMEROS AUX­IL­IOS Y MA­TE­R­I­AL DE SEGURIDAD
  • SERVICIOS OPCIONALES

    Los sigu­ientes com­ple­men­tos re­querirán el abono de una tar­i­fa adicional:

    • CÁ­MARA GOPRO®
    • Grabación con DRON (ser­vi­cio de pi­lota­je incluido)
  • SERVICIOS PERSONALIZADOS

    Podemos or­ga­ni­zar ITIN­ER­AR­IOS PER­SON­AL­IZA­DOS a peti­ción del cliente. En es­tos ca­sos, la tar­i­fa a abonar habrá de ser fi­ja­da pre­vi­a­mente por acuer­do en­tre las partes, en fun­ción de los ser­vi­cios solicitados.

  • PAGOS Y RESERVAS

    El pago de la tar­i­fa bási­ca se hará por ade­lan­ta­do y de­berá haber sido com­ple­ta­do el día pre­vio a la re­al­ización de la ac­tivi­dad.

    Para for­malizar una reser­va será nece­sario abonar un 30% de dicha tarifa.

    Acep­ta­mos pa­gos en las sigu­ientes divisas:

    • 원 Won SUR­CORE­ANO (₩)
    • 新臺幣 Nue­vo dólar TAI­WANÉS (NT$)
    • 港幣 Dólar de HONG KONG (HK$)
    • Dólar de SIN­GA­PUR (S$)
    • 円 Yen JAPONÉS (¥)
    • EURO (€)
    • DÓLAR amer­i­cano (US$)
    • שֶׁקֶל חָדָשׁ Nue­vo Shekel IS­RAELÍ (₪)
  • CANCELACIONES

    En caso de can­celación por parte del cliente, bien por mo­tivos de salud o por otras causas, jus­ti­fi­cadas o no, la em­pre­sa ten­drá dere­cho a reten­er toda can­ti­dad abona­da por anticipado.

    En caso de can­celación atribuible a la em­pre­sa, el cliente ten­drá dere­cho a la de­volu­ción ín­te­gra de cualquier im­porte adelantado.

    En caso de can­celación no atribuible a ningu­na de las partes, como por causa me­te­o­rológ­i­ca, de fuerza may­or o rela­ciona­da con la se­guri­dad, se dis­tin­guirán tres es­ce­nar­ios diferentes:

    • Si la can­celación tiene lu­gar ha­bi­en­do sido re­al­iza­do un an­ticipo del 30%, se de­volverá la to­tal­i­dad del im­porte adelantado
    • Si la can­celación tiene lu­gar ha­bi­en­do sido abona­do el 100% de la tar­i­fa, pero antes del ini­cio de la ac­tivi­dad, la em­pre­sa re­tendrá el 30% para re­spon­der por los gas­tos rela­ciona­dos con la preparación de la mis­ma, y el cliente ten­drá dere­cho a la de­volu­ción del 70% restante
    • Si la can­celación tiene lu­gar en el tran­scur­so de la ac­tivi­dad, la em­pre­sa ten­drá dere­cho a reten­er el 100% de la can­ti­dad adelantada

    POLÍTI­CA DE DE­VOLU­CIÓN EN CASO DE CAN­CELACIÓN (% a re­cu­per­ar por el cliente so­bre lo abonado)

    Atribuible a… Con reser­va del 30% Abona­do el 100% Du­rante la actividad
    CLIENTE 0% 0% 0%
    EM­PRE­SA 100% 100% 100%
    CAUSAS EX­TER­NAS 100% 70% 0%
  • DESCUENTOS

    Po­drán ser aplic­a­bles los sigu­ientes descuentos:

    • Ser­vi­cio gra­tu­ito para niños menores de 6 años. Además, de­s­cuen­to del 50% en la tar­i­fa bási­ca para los niños de 6 y 7 años, del 30% para los de 8 y 9 y del 15% para los que ten­gan en­tre 10 y 12. A par­tir de los 13 años se apli­cará la tar­i­fa regular.
    • En caso de can­celación pre­via a la prestación del ser­vi­cio por causa me­te­o­rológ­i­ca o de fuerza may­or no atribuible a ningu­na de las partes, se po­drá dis­fru­tar de una re­duc­ción del 10% en la tar­i­fa bási­ca en un in­ten­to pos­te­ri­or, caso de con­tratarse el mis­mo pro­duc­to. Di­cho de­s­cuen­to será del 20% si la can­celación por es­tas causas tiene lu­gar du­rante la prestación del ser­vi­cio.
Términos y condiciones
  • METEOROLOGÍA Y SEGURIDAD

    La me­te­o­rología y la se­guri­dad son cues­tiones pri­mor­diales a la hora de re­alizar ac­tivi­dades al aire li­bre. La em­pre­sa es­tará oblig­a­da a in­for­mar al cliente tan­to de las condi­ciones me­te­o­rológ­i­cas es­per­adas el día de la ac­tivi­dad como de los peli­gros y mo­les­tias a los que éste pue­da verse ex­puesto du­rante su re­al­ización. De igual modo, el cliente de­jará con­stan­cia por es­crito de su conocimien­to, y de la asun­ción vol­un­taria del ries­go de­riva­do de los mis­mos, al tiem­po que ex­imirá a la em­pre­sa de toda re­spon­s­abil­i­dad en caso de ac­ci­dente no atribuible a neg­li­gen­cia o mala prax­is. En tan­to dicha in­for­ma­ción sea pues­ta a dis­posi­ción de los clientes de for­ma públi­ca y no­to­ria, in­de­pen­di­en­te­mente de cuál fuere la vía, el abono de cualquier can­ti­dad en relación con la con­trat­ación de los ser­vi­cios será tam­bién con­sid­er­a­do como una prue­ba de con­formi­dad por parte del cliente.

    Du­rante la nave­gación marí­ti­ma o la re­al­ización de ac­tivi­dades que guarden relación con ella, el capitán ten­drá siem­pre la úl­ti­ma pal­abra en ma­te­ria de plan­i­fi­cación y seguridad.

  • CAPACIDAD

    Las ac­tivi­dades que re­quier­an nave­gación marí­ti­ma ten­drán un límite de 12 par­tic­i­pantes, por ser ésta la ca­paci­dad máx­i­ma au­tor­iza­da de nue­stro bar­co de pasajeros. Cuan­do sea nece­sario per­noc­tar en el bar­co (e.g., en el manglar), po­drá ser aco­moda­do a bor­do un máx­i­mo de 8 pasajeros.

  • VIAJES COMPARTIDOS

    Com­par­tir el bar­co con otros vi­a­jeros no sólo es posi­ble, sino tam­bién, des­de nue­stro pun­to de vista, la op­ción más re­comend­able. Al com­par­tir con­seguirás abaratar tu tar­i­fa por per­sona, cono­cerás gente con la que ten­drás mu­cho en común y crearás un am­bi­ente mu­cho más ameno y agrad­able a bor­do. Si ya habías reser­va­do o eres el primero en con­tratar nue­stros ser­vi­cios, ten­drás pri­or­i­dad en el uso ex­clu­si­vo de nue­stro bar­co. Pero de­jare­mos siem­pre la puer­ta abier­ta a la in­cor­po­ración de úl­ti­ma hora de nuevos vi­a­jeros, en la que tú ten­drás siem­pre la úl­ti­ma pal­abra. Si ac­cedes a com­par­tir, al pro­ducirse un cam­bio en el número to­tal de pasajeros, te de­volver­e­mos la difer­en­cia en­tre la tar­i­fa que hu­bieras abona­do ini­cial­mente y la nue­va tar­i­fa que sea de aplicación.

  • HORA DE INICIO Y DURACIÓN

    El bar­co suele zarpar del puer­to de Tay­tay en­tre las 7 y las 8 de la mañana. So­mos, sin em­bar­go, bas­tante flex­i­bles en cuan­to al ho­rario y podemos or­ga­ni­zar la sal­i­da en otras fran­jas ho­rarias. La hora de re­gre­so de­pen­derá del pro­duc­to contratado.

  • COMIDA Y BEBIDA

    La tar­i­fa bási­ca para los itin­er­ar­ios de un día de du­ración incluirá:

    • Ac­ce­so ilim­i­ta­do a agua y be­bidas calientes du­rante todo el recorrido
    • 3 co­mi­das al día, que serán servi­das du­rante la nave­gación o aprovechan­do al­gu­na de las paradas
  • SERVICIOS INCLUIDOS

    Con la tar­i­fa bási­ca además se po­drá dis­fru­tar de:

    • SER­VI­CIO DE GUÍA
    • MA­TE­R­I­AL DE BUCEO Y KAYAKS (ilim­i­ta­do). TOAL­LAS Y ES­CARPINES.
    • MA­TE­R­I­AL DE ACAM­PA­DA (tien­das de cam­paña, col­chone­tas hinch­ables, al­mo­hadas, sábanas, linternas…)
    • TAR­I­FA DE ACCESO/TASA MEDIOAM­BI­EN­TAL, en su caso (e.g. is­las pri­vadas, ar­eas protegidas…)
    • SE­GURO DE NAVE­GACIÓN, KITS DE PRIMEROS AUX­IL­IOS Y MA­TE­R­I­AL DE SEGURIDAD
  • SERVICIOS OPCIONALES

    Los sigu­ientes com­ple­men­tos re­querirán el abono de una tar­i­fa adicional:

    • CÁ­MARA GOPRO®
    • Grabación con DRON (ser­vi­cio de pi­lota­je incluido)
  • SERVICIOS PERSONALIZADOS

    Podemos or­ga­ni­zar ITIN­ER­AR­IOS PER­SON­AL­IZA­DOS a peti­ción del cliente. En es­tos ca­sos, la tar­i­fa a abonar habrá de ser fi­ja­da pre­vi­a­mente por acuer­do en­tre las partes, en fun­ción de los ser­vi­cios solicitados.

  • PAGOS Y RESERVAS

    El pago de la tar­i­fa bási­ca se hará por ade­lan­ta­do y de­berá haber sido com­ple­ta­do el día pre­vio a la re­al­ización de la ac­tivi­dad.

    Para for­malizar una reser­va será nece­sario abonar un 30% de dicha tarifa.

    Acep­ta­mos pa­gos en las sigu­ientes divisas:

    • 원 Won SUR­CORE­ANO (₩)
    • 新臺幣 Nue­vo dólar TAI­WANÉS (NT$)
    • 港幣 Dólar de HONG KONG (HK$)
    • Dólar de SIN­GA­PUR (S$)
    • 円 Yen JAPONÉS (¥)
    • EURO (€)
    • DÓLAR amer­i­cano (US$)
    • שֶׁקֶל חָדָשׁ Nue­vo Shekel IS­RAELÍ (₪)
  • CANCELACIONES

    En caso de can­celación por parte del cliente, bien por mo­tivos de salud o por otras causas, jus­ti­fi­cadas o no, la em­pre­sa ten­drá dere­cho a reten­er toda can­ti­dad abona­da por anticipado.

    En caso de can­celación atribuible a la em­pre­sa, el cliente ten­drá dere­cho a la de­volu­ción ín­te­gra de cualquier im­porte adelantado.

    En caso de can­celación no atribuible a ningu­na de las partes, como por causa me­te­o­rológ­i­ca, de fuerza may­or o rela­ciona­da con la se­guri­dad, se dis­tin­guirán tres es­ce­nar­ios diferentes:

    • Si la can­celación tiene lu­gar ha­bi­en­do sido re­al­iza­do un an­ticipo del 30%, se de­volverá la to­tal­i­dad del im­porte adelantado
    • Si la can­celación tiene lu­gar ha­bi­en­do sido abona­do el 100% de la tar­i­fa, pero antes del ini­cio de la ac­tivi­dad, la em­pre­sa re­tendrá el 30% para re­spon­der por los gas­tos rela­ciona­dos con la preparación de la mis­ma, y el cliente ten­drá dere­cho a la de­volu­ción del 70% restante
    • Si la can­celación tiene lu­gar en el tran­scur­so de la ac­tivi­dad, la em­pre­sa ten­drá dere­cho a reten­er el 100% de la can­ti­dad adelantada

    POLÍTI­CA DE DE­VOLU­CIÓN EN CASO DE CAN­CELACIÓN (% a re­cu­per­ar por el cliente so­bre lo abonado)

    Atribuible a… Con reser­va del 30% Abona­do el 100% Du­rante la actividad
    CLIENTE 0% 0% 0%
    EM­PRE­SA 100% 100% 100%
    CAUSAS EX­TER­NAS 100% 70% 0%
  • DESCUENTOS

    Po­drán ser aplic­a­bles los sigu­ientes descuentos:

    • Ser­vi­cio gra­tu­ito para niños menores de 6 años. Además, de­s­cuen­to del 50% en la tar­i­fa bási­ca para los niños de 6 y 7 años, del 30% para los de 8 y 9 y del 15% para los que ten­gan en­tre 10 y 12. A par­tir de los 13 años se apli­cará la tar­i­fa regular.
    • En caso de can­celación pre­via a la prestación del ser­vi­cio por causa me­te­o­rológ­i­ca o de fuerza may­or no atribuible a ningu­na de las partes, se po­drá dis­fru­tar de una re­duc­ción del 10% en la tar­i­fa bási­ca en un in­ten­to pos­te­ri­or, caso de con­tratarse el mis­mo pro­duc­to. Di­cho de­s­cuen­to será del 20% si la can­celación por es­tas causas tiene lu­gar du­rante la prestación del ser­vi­cio.
Términos y condiciones

METEOROLOGÍA Y SEGURIDAD

La me­te­o­rología y la se­guri­dad son cues­tiones pri­mor­diales a la hora de re­alizar ac­tivi­dades al aire li­bre. La em­pre­sa es­tará oblig­a­da a in­for­mar al cliente tan­to de las condi­ciones me­te­o­rológ­i­cas es­per­adas el día de la ac­tivi­dad como de los peli­gros y mo­les­tias a los que éste pue­da verse ex­puesto du­rante su re­al­ización. De igual modo, el cliente de­jará con­stan­cia por es­crito de su conocimien­to, y de la asun­ción vol­un­taria del ries­go de­riva­do de los mis­mos, al tiem­po que ex­imirá a la em­pre­sa de toda re­spon­s­abil­i­dad en caso de ac­ci­dente no atribuible a neg­li­gen­cia o mala prax­is. En tan­to dicha in­for­ma­ción sea pues­ta a dis­posi­ción de los clientes de for­ma públi­ca y no­to­ria, in­de­pen­di­en­te­mente de cuál fuere la vía, el abono de cualquier can­ti­dad en relación con la con­trat­ación de los ser­vi­cios será tam­bién con­sid­er­a­do como una prue­ba de con­formi­dad por parte del cliente.

Du­rante la nave­gación marí­ti­ma o la re­al­ización de ac­tivi­dades que guarden relación con ella, el capitán ten­drá siem­pre la úl­ti­ma pal­abra en ma­te­ria de plan­i­fi­cación y seguridad.

CAPACIDAD

Las ac­tivi­dades que re­quier­an nave­gación marí­ti­ma ten­drán un límite de 12 par­tic­i­pantes, por ser ésta la ca­paci­dad máx­i­ma au­tor­iza­da de nue­stro bar­co de pasajeros. Cuan­do sea nece­sario per­noc­tar en el bar­co (e.g., en el manglar), po­drá ser aco­moda­do a bor­do un máx­i­mo de 8 pasajeros.

VIAJES COMPARTIDOS

Com­par­tir el bar­co con otros vi­a­jeros no sólo es posi­ble, sino tam­bién, des­de nue­stro pun­to de vista, la op­ción más re­comend­able. Al com­par­tir con­seguirás abaratar tu tar­i­fa por per­sona, cono­cerás gente con la que ten­drás mu­cho en común y crearás un am­bi­ente mu­cho más ameno y agrad­able a bor­do. Si ya habías reser­va­do o eres el primero en con­tratar nue­stros ser­vi­cios, ten­drás pri­or­i­dad en el uso ex­clu­si­vo de nue­stro bar­co. Pero de­jare­mos siem­pre la puer­ta abier­ta a la in­cor­po­ración de úl­ti­ma hora de nuevos vi­a­jeros, en la que tú ten­drás siem­pre la úl­ti­ma pal­abra. Si ac­cedes a com­par­tir, al pro­ducirse un cam­bio en el número to­tal de pasajeros, te de­volver­e­mos la difer­en­cia en­tre la tar­i­fa que hu­bieras abona­do ini­cial­mente y la nue­va tar­i­fa que sea de aplicación.

HORA DE INICIO Y DURACIÓN

El bar­co suele zarpar del puer­to de Tay­tay en­tre las 7 y las 8 de la mañana. So­mos, sin em­bar­go, bas­tante flex­i­bles en cuan­to al ho­rario y podemos or­ga­ni­zar la sal­i­da en otras fran­jas ho­rarias. La hora de re­gre­so de­pen­derá del pro­duc­to contratado.

COMIDA Y BEBIDA

La tar­i­fa bási­ca para los itin­er­ar­ios de un día de du­ración incluirá:

  • Ac­ce­so ilim­i­ta­do a agua y be­bidas calientes du­rante todo el recorrido
  • 3 co­mi­das al día, que serán servi­das du­rante la nave­gación o aprovechan­do al­gu­na de las paradas

SERVICIOS INCLUIDOS

Con la tar­i­fa bási­ca además se po­drá dis­fru­tar de:

  • SER­VI­CIO DE GUÍA
  • MA­TE­R­I­AL DE BUCEO Y KAYAKS (ilim­i­ta­do). TOAL­LAS Y ES­CARPINES.
  • MA­TE­R­I­AL DE ACAM­PA­DA (tien­das de cam­paña, col­chone­tas hinch­ables, al­mo­hadas, sábanas, linternas…)
  • TAR­I­FA DE ACCESO/TASA MEDIOAM­BI­EN­TAL, en su caso (e.g. is­las pri­vadas, ar­eas protegidas…)
  • SE­GURO DE NAVE­GACIÓN, KITS DE PRIMEROS AUX­IL­IOS Y MA­TE­R­I­AL DE SEGURIDAD

SERVICIOS OPCIONALES

Los sigu­ientes com­ple­men­tos re­querirán el abono de una tar­i­fa adicional:

  • CÁ­MARA GOPRO®
  • Grabación con DRON (ser­vi­cio de pi­lota­je incluido)

SERVICIOS PERSONALIZADOS

Podemos or­ga­ni­zar ITIN­ER­AR­IOS PER­SON­AL­IZA­DOS a peti­ción del cliente. En es­tos ca­sos, la tar­i­fa a abonar habrá de ser fi­ja­da pre­vi­a­mente por acuer­do en­tre las partes, en fun­ción de los ser­vi­cios solicitados.

PAGOS Y RESERVAS

El pago de la tar­i­fa bási­ca se hará por ade­lan­ta­do y de­berá haber sido com­ple­ta­do el día pre­vio a la re­al­ización de la ac­tivi­dad.

Para for­malizar una reser­va será nece­sario abonar un 30% de dicha tarifa.

Acep­ta­mos pa­gos en las sigu­ientes divisas:

  • 원 Won SUR­CORE­ANO (₩)
  • 新臺幣 Nue­vo dólar TAI­WANÉS (NT$)
  • 港幣 Dólar de HONG KONG (HK$)
  • Dólar de SIN­GA­PUR (S$)
  • 円 Yen JAPONÉS (¥)
  • EURO (€)
  • DÓLAR amer­i­cano (US$)
  • שֶׁקֶל חָדָשׁ Nue­vo Shekel IS­RAELÍ (₪)

CANCELACIONES

En caso de can­celación por parte del cliente, bien por mo­tivos de salud o por otras causas, jus­ti­fi­cadas o no, la em­pre­sa ten­drá dere­cho a reten­er toda can­ti­dad abona­da por anticipado.

En caso de can­celación atribuible a la em­pre­sa, el cliente ten­drá dere­cho a la de­volu­ción ín­te­gra de cualquier im­porte adelantado.

En caso de can­celación no atribuible a ningu­na de las partes, como por causa me­te­o­rológ­i­ca, de fuerza may­or o rela­ciona­da con la se­guri­dad, se dis­tin­guirán tres es­ce­nar­ios diferentes:

  • Si la can­celación tiene lu­gar ha­bi­en­do sido re­al­iza­do un an­ticipo del 30%, se de­volverá la to­tal­i­dad del im­porte adelantado
  • Si la can­celación tiene lu­gar ha­bi­en­do sido abona­do el 100% de la tar­i­fa, pero antes del ini­cio de la ac­tivi­dad, la em­pre­sa re­tendrá el 30% para re­spon­der por los gas­tos rela­ciona­dos con la preparación de la mis­ma, y el cliente ten­drá dere­cho a la de­volu­ción del 70% restante
  • Si la can­celación tiene lu­gar en el tran­scur­so de la ac­tivi­dad, la em­pre­sa ten­drá dere­cho a reten­er el 100% de la can­ti­dad adelantada

POLÍTI­CA DE DE­VOLU­CIÓN EN CASO DE CAN­CELACIÓN (% a re­cu­per­ar por el cliente so­bre lo abonado)

DESCUENTOS

Po­drán ser aplic­a­bles los sigu­ientes descuentos:

  • Ser­vi­cio gra­tu­ito para niños menores de 6 años. Además, de­s­cuen­to del 50% en la tar­i­fa bási­ca para los niños de 6 y 7 años, del 30% para los de 8 y 9 y del 15% para los que ten­gan en­tre 10 y 12. A par­tir de los 13 años se apli­cará la tar­i­fa regular.
  • En caso de can­celación pre­via a la prestación del ser­vi­cio por causa me­te­o­rológ­i­ca o de fuerza may­or no atribuible a ningu­na de las partes, se po­drá dis­fru­tar de una re­duc­ción del 10% en la tar­i­fa bási­ca en un in­ten­to pos­te­ri­or, caso de con­tratarse el mis­mo pro­duc­to. Di­cho de­s­cuen­to será del 20% si la can­celación por es­tas causas tiene lu­gar du­rante la prestación del ser­vi­cio.
Ten siempre en cuenta…

MAREOS

En el mar, las condi­ciones pueden cam­biar de for­ma ráp­i­da e im­pre­vis­i­ble. E in­clu­so con un mar en cal­ma, las per­sonas con poca ex­pe­ri­en­cia en nave­gación pueden marearse fá­cil­mente. No lo de­jes al azar, trae PÍL­DO­RAS CON­TRA EL MAREO a cualquier vi­a­je en bar­co.

RADIACIÓN SOLAR

Aunque nue­stro bar­co está pro­vis­to de lonas de som­breo, debes pro­te­gerte del sol en todo mo­men­to uti­lizan­do CRE­MA SO­LAR, SOM­BRERO Y MAN­GA LARGA. En el trópi­co, la ra­diación in­cide muy ver­ti­cal­mente so­bre la su­per­fi­cie ter­restre y puede causar im­por­tantes que­maduras en ape­nas unos min­u­tos de exposición.

HIDRATACIÓN

El agua es siem­pre la mejor in­ver­sión que puedes hac­er. Ll­e­va con­ti­go tan­ta agua como sea posi­ble, en detri­men­to de co­mi­da u otros tipos de car­ga. El ham­bre re­sul­ta mo­les­ta, sí, pero la deshidrat­ación puede lle­gar a matar en cuestión de min­u­tos. Si aun así quieres ll­e­var con­ti­go algo de co­mi­da du­rante el vi­a­je, elige pref­er­ente­mente al­i­men­tos pe­queños y al­ta­mente calóri­cos (p. ej. fru­tos sec­os y bar­ri­tas energéticas).

MOJARSE

Acep­té­moslo, no hay lu­gar para el con­fort y la se­quedad en el tópi­co, di­gan lo que di­gan los fab­ri­cantes de ropa de­porti­va. Aunque no llue­va, tu ropa y calza­do es­tarán siem­pre mo­ja­dos, ya sea por la humedad del en­torno o por tu pro­pio su­dor. Con­cen­tra tus es­fuer­zos en man­ten­er la mochi­la seca y mejor deja el chubas­quero en casa, a menos que quieras su­dar el doble y quedar en­gan­cha­do por doquier.

En el bar­co, es­tar mo­ja­do será tam­bién tu es­ta­do ha­bit­u­al. Se­gu­ra­mente irás zam­bul­lén­dote a cada paso, sin tiem­po para se­carte en­tre una para­da y otra, y ten­drás que lidiar además con la salpica­du­ra de las olas du­rante la nave­gación. No sería ex­traño, de he­cho, que lle­gas­es a sen­tir frío con la brisa al nave­g­ar. Por eso tu mejor op­ción será ve­stir pren­das lig­eras de li­cra, a ser posi­ble de las dis­eñadas es­pecí­fi­ca­mente para prac­ticar de­portes náu­ti­cos. Tam­bién ayu­dará ir pro­vis­to de es­carpines y toal­la.

ALERGIAS

Las aler­gias de­bidas al polen son raras en el trópi­co húme­do, por la alta di­ver­si­dad y baja abun­dan­cia rel­a­ti­va de cada es­pecie par­tic­u­lar de plan­ta. Las plan­tas trop­i­cales, además, han evolu­ciona­do en su may­oría para ser polin­izadas por in­sec­tos u otros an­i­males, y rara vez re­cur­ren al vien­to como ­medio de dispersión.

Las aler­gias cutáneas y las rela­cionadas con las pica­duras de in­sec­tos son sin em­bar­go de lo más ha­bit­u­al. De he­cho, si eres alér­gi­co a las abe­jas o las avis­pas quizá no sea mala idea vi­a­jar con tu pro­pio in­yectable de epine­f­rina. Y claro está, en am­bos ca­sos la man­ga larga será de gran ayuda.

Ex­iste tam­bién el ries­go de sufrir al­gu­na aler­gia al­i­men­ta­ria o in­tol­er­an­cia a los al­i­men­tos que servi­mos du­rante las ac­tivi­dades. Por fa­vor, in­fór­manos lo antes posi­ble de cualquier ALER­GIA O RE­QUER­IM­IEN­TO AL­I­MEN­TI­CIO ES­PE­CIAL que puedas ten­er, in­clu­i­dos los rela­ciona­dos con tu cre­do o religión.

MOSQUITOS Y SIMILARES

¿Ti­gres? ¿Ser­pi­entes? Mejor pre­ocú­pate por los mos­qui­tos, no en vano son con­sid­er­a­dos el an­i­mal más mortífero de la tier­ra. La malar­ia, el dengue y otras en­fer­medades trans­mi­ti­das por in­sec­tos son aún endémi­cas en Palawan. Para la malar­ia, la pro­fi­lax­is quími­ca puede ser de gran ayu­da, y en to­dos los ca­sos lo será la ropa de man­ga larga, el re­pe­lente de in­sec­tos (de cal­i­dad) y, fun­da­men­tal­mente, el refu­gio en las ho­ras de may­or ac­tivi­dad (alba y ocaso).

Los tábanos pueden lle­gar a ser una mo­les­tia en las zonas ru­rales con pres­en­cia de bú­fa­los u otro gana­do. Las san­gui­jue­las, por su parte, son bas­tante raras en Palawan.

Aunque los in­sec­tos no son un prob­le­ma en nave­gación, es ha­bit­u­al sufrir el ataque de mos­qui­tos y je­jenes (fle­bó­to­mos) tam­bién du­rante los vi­a­jes en bar­co, en las playas y manglares en los que se hace es­cala. És­tos serán más abun­dantes cuan­to may­or sea la can­ti­dad de ma­te­ria orgáni­ca en de­scom­posi­ción cer­ca de la oril­la, y más es­pe­sa la veg­etación circundante.

FAUNA PELIGROSA

A pe­sar de ser la may­or pre­ocu­pación para mu­chos vi­a­jeros, este asun­to en re­al­i­dad no merece tan­ta aten­ción como se le pres­ta. Lo creas o no, tienes más prob­a­bil­i­dades de torcerte un to­bil­lo, o in­clu­so de ten­er un ac­ci­dente de trá­fi­co de camino a nue­stro bar­co, que de sufrir un per­cance con al­gún an­i­mal sal­va­je.

Los grandes depredadores acuáti­cos, como los tiburones y los coco­dri­los, son seres ex­tremada­mente raros, no solo por su posi­ción en lo alto de la ca­de­na al­i­men­ta­ria, sino tam­bién por la per­se­cu­ción a la que se han vis­to someti­dos du­rante sig­los. Si aun así te en­cuen­tras con uno, tra­ta de no com­por­tarte como una pre­sa. Man­tén la cal­ma, per­manece en tu posi­ción y sim­ple­mente es­pera a que siga su camino. A fin de cuen­tas, si se ha de­ja­do ver, prob­a­ble­mente no esté muy in­tere­sa­do en ti. Para el caso con­cre­to de los coco­dri­los, evi­ta las ac­tivi­dades rui­dosas cer­ca de la oril­la en aguas de poca vis­i­bil­i­dad, y nun­ca te ac­erques a uno ni den­tro ni fuera del agua, aun des­de una em­bar­cación, son muy ter­ri­to­ri­ales y pueden lle­gar a embestirte.

En gen­er­al, será a las criat­uras pe­queñas a quienes de­bamos prestar más aten­ción, lo cual es par­tic­u­lar­mente cier­to en tier­ra en Palawan, donde el may­or depredador ape­nas al­can­za la tal­la de un per­ro me­di­ano. Para to­das el­las, tan­to en tier­ra como en el mar, bas­tará con ve­stir ropa ade­cua­da, vig­i­lar nue­stros pa­sos y seguir una políti­ca es­tric­ta de “no to­car”.

MANGA LARGA Y CALZADO ADECUADO

Aunque pue­da pare­cer una idea ab­sur­da a primera vista, la camisa y el pan­talón largo son la mejor op­ción para mo­verse por la sel­va trop­i­cal. Hay un mil­lón de ra­zones para ello: oru­gas ur­ticantes, ratanes es­pinosos, pan­danos cor­tantes… Una ropa ade­cua­da nos pro­te­gerá no solo del con­tac­to abra­si­vo con el en­torno, sino tam­bién de la pica­du­ra de mos­qui­tos, je­jenes, hormi­gas y san­gui­jue­las. Para es­tos dos úl­ti­mos, será de gran ayu­da ve­stir cal­cetines grue­sos ajus­ta­dos por enci­ma de los pan­talones.

En el mar, la man­ga larga evi­tará las que­maduras so­lares fuera del agua, y el roce de cubome­dusas y otro planc­ton gelati­noso den­tro de ella. Los es­carpines, por su parte, im­pedirán que nos dañe­mos al cam­i­nar so­bre el ar­recife, y ayu­darán a pre­venir en­cuen­tros in­de­sea­d­os con la fau­na peli­grosa que vive en el fon­do, como los peces piedra, los er­i­zos y las rayas.

TOCAR Y AGARRAR

En el bosque trop­i­cal, evi­ta apo­yarte o col­garte de cuan­to te rodea. Sabe­mos que el ter­reno es com­pli­ca­do y man­ten­er el equi­lib­rio difí­cil. Pero las ra­mas y los tron­cos no serán la solu­ción a tu prob­le­ma. No solo porque puedan es­tar pro­vis­tos de es­pinas, resinas o pe­los ur­ticantes, sino tam­bién por ser el hog­ar de hormi­gas de fuego, ciem­piés, ser­pi­entes y otras tan­tas criat­uras que no te quieres en­con­trar. Mejor no pier­das de vista tus manos, vig­i­la tus pa­sos y echa siem­pre un vis­ta­zo al sue­lo antes de sen­tarte en él. Y cuan­do no es­tés us­an­do tu mochi­la, asegúrate de cer­rar­la bien. Por cier­to, ag­i­tar lianas o ár­boles jóvenes es par­tic­u­lar­mente peli­groso, porque pueden es­con­der panales en su parte alta o es­tar conec­ta­dos a ra­mas po­dri­das que caerían so­bre tu cabeza. Olvi­da ya esa fan­tasía ab­sur­da de ser Tarzán por un día.

En el mar, muy es­pe­cial­mente, nun­ca debes to­car nada, aunque creas que sabes bien lo que es. Muchas criat­uras mari­nas de as­pec­to in­ofen­si­vo en re­al­i­dad no lo son tan­to. Los corales vivos, por ejem­p­lo, son tan ur­ticantes como las ané­monas y las medusas, e in­clu­so de­spués de muer­tos pueden provo­car heri­das que tien­den a in­fec­tarse do­lorosa­mente. Y es que aquí nada es lo que parece, has­ta un sim­ple pulpo puede lle­gar a ser letal.

Al nadar y bucear, evi­ta gol­pear el fon­do con los pies, para pro­te­ger tu propia in­te­gri­dad y evi­tar el daño a un ar­recife que habrá re­queri­do cien­tos de años para lle­gar a su es­ta­do actual.

LIGEREZA

Cuan­to más ligero mejor. No nece­si­tas car­gar con mil cosas para dis­fru­tar un poco de la nat­u­raleza. El ex­ce­so de car­ga te más hará tor­pe, lento y rui­doso. No verás nada a tu alrede­dor y te cansarás mu­cho más rápi­do. Te bas­tará con ll­e­var con­ti­go agua en abun­dan­cia, re­pe­lente de in­sec­tos y por supuesto… ¡tus pris­máti­cos y tu cá­mara de fotos!

SILENCIO

La nat­u­raleza solo rev­ela sus se­cre­tos en si­len­cio. En esta parte del mun­do, la vida lit­eral­mente te rodea por to­das partes y solo tienes que dar­le una opor­tu­nidad para mostrarse. Tra­ta de con­tro­lar tus emo­ciones y con­cén­trate, pron­to no­tarás los re­sul­ta­dos. A fin de cuen­tas, no has venido tan lejos para ver solo un puña­do de ho­jas y ramas.

AVISTAMIENTOS DE FAUNA

Aunque re­sulte una ob­viedad debe­mos hac­er hin­capié en este pun­to: los an­i­males sal­va­jes son seres im­pre­deci­bles por nat­u­raleza. Pre­cisa­mente ahí rad­i­ca la ma­gia de los avis­tamien­tos. Así, aunque hare­mos todo cuan­to esté en nues­tra mano para que se pro­duz­can en­cuen­tros, no po­dremos en ningún caso garan­ti­zar­los.

RESPETO

Éste es, sin duda, el con­se­jo más im­por­tante que podemos dar a cualquier vi­a­jero. En esta parte del mun­do, la nat­u­raleza tiene mu­cho que ofre­cer­nos, pero tam­bién mu­cho que ar­rebatarnos. No ven­gas con miedo, solo sé cauteloso y sigue en todo mo­men­to los con­se­jos de tu guía. Y ante la duda, el re­speto y la pre­cau­ción son siem­pre la mejor her­ramien­ta. Sim­ple­mente ven, dis­fru­ta con hu­mil­dad y vuelve a casa sano y sal­vo para contarlo.

Ten siempre en cuenta…
  • MAREOS

    En el mar, las condi­ciones pueden cam­biar de for­ma ráp­i­da e im­pre­vis­i­ble. E in­clu­so con un mar en cal­ma, las per­sonas con poca ex­pe­ri­en­cia en nave­gación pueden marearse fá­cil­mente. No lo de­jes al azar, trae PÍL­DO­RAS CON­TRA EL MAREO a cualquier vi­a­je en bar­co.

  • RADIACIÓN SOLAR

    Aunque nue­stro bar­co está pro­vis­to de lonas de som­breo, debes pro­te­gerte del sol en todo mo­men­to uti­lizan­do CRE­MA SO­LAR, SOM­BRERO Y MAN­GA LARGA. En el trópi­co, la ra­diación in­cide muy ver­ti­cal­mente so­bre la su­per­fi­cie ter­restre y puede causar im­por­tantes que­maduras en ape­nas unos min­u­tos de exposición.

  • HIDRATACIÓN

    El agua es siem­pre la mejor in­ver­sión que puedes hac­er. Ll­e­va con­ti­go tan­ta agua como sea posi­ble, en detri­men­to de co­mi­da u otros tipos de car­ga. El ham­bre re­sul­ta mo­les­ta, sí, pero la deshidrat­ación puede lle­gar a matar en cuestión de min­u­tos. Si aun así quieres ll­e­var con­ti­go algo de co­mi­da du­rante el vi­a­je, elige pref­er­ente­mente al­i­men­tos pe­queños y al­ta­mente calóri­cos (p. ej. fru­tos sec­os y bar­ri­tas energéticas).

  • MOJARSE

    Acep­té­moslo, no hay lu­gar para el con­fort y la se­quedad en el tópi­co, di­gan lo que di­gan los fab­ri­cantes de ropa de­porti­va. Aunque no llue­va, tu ropa y calza­do es­tarán siem­pre mo­ja­dos, ya sea por la humedad del en­torno o por tu pro­pio su­dor. Con­cen­tra tus es­fuer­zos en man­ten­er la mochi­la seca y mejor deja el chubas­quero en casa, a menos que quieras su­dar el doble y quedar en­gan­cha­do por doquier.

    En el bar­co, es­tar mo­ja­do será tam­bién tu es­ta­do ha­bit­u­al. Se­gu­ra­mente irás zam­bul­lén­dote a cada paso, sin tiem­po para se­carte en­tre una para­da y otra, y ten­drás que lidiar además con la salpica­du­ra de las olas du­rante la nave­gación. No sería ex­traño, de he­cho, que lle­gas­es a sen­tir frío con la brisa al nave­g­ar. Por eso tu mejor op­ción será ve­stir pren­das lig­eras de li­cra, a ser posi­ble de las dis­eñadas es­pecí­fi­ca­mente para prac­ticar de­portes náu­ti­cos. Tam­bién ayu­dará ir pro­vis­to de es­carpines y toal­la.

  • ALERGIAS

    Las aler­gias de­bidas al polen son raras en el trópi­co húme­do, por la alta di­ver­si­dad y baja abun­dan­cia rel­a­ti­va de cada es­pecie par­tic­u­lar de plan­ta. Las plan­tas trop­i­cales, además, han evolu­ciona­do en su may­oría para ser polin­izadas por in­sec­tos u otros an­i­males, y rara vez re­cur­ren al vien­to como ­medio de dispersión.

    Las aler­gias cutáneas y las rela­cionadas con las pica­duras de in­sec­tos son sin em­bar­go de lo más ha­bit­u­al. De he­cho, si eres alér­gi­co a las abe­jas o las avis­pas quizá no sea mala idea vi­a­jar con tu pro­pio in­yectable de epine­f­rina. Y claro está, en am­bos ca­sos la man­ga larga será de gran ayuda.

    Ex­iste tam­bién el ries­go de sufrir al­gu­na aler­gia al­i­men­ta­ria o in­tol­er­an­cia a los al­i­men­tos que servi­mos du­rante las ac­tivi­dades. Por fa­vor, in­fór­manos lo antes posi­ble de cualquier ALER­GIA O RE­QUER­IM­IEN­TO AL­I­MEN­TI­CIO ES­PE­CIAL que puedas ten­er, in­clu­i­dos los rela­ciona­dos con tu cre­do o religión.

  • MOSQUITOS Y SIMILARES

    ¿Ti­gres? ¿Ser­pi­entes? Mejor pre­ocú­pate por los mos­qui­tos, no en vano son con­sid­er­a­dos el an­i­mal más mortífero de la tier­ra. La malar­ia, el dengue y otras en­fer­medades trans­mi­ti­das por in­sec­tos son aún endémi­cas en Palawan. Para la malar­ia, la pro­fi­lax­is quími­ca puede ser de gran ayu­da, y en to­dos los ca­sos lo será la ropa de man­ga larga, el re­pe­lente de in­sec­tos (de cal­i­dad) y, fun­da­men­tal­mente, el refu­gio en las ho­ras de may­or ac­tivi­dad (alba y ocaso).

    Los tábanos pueden lle­gar a ser una mo­les­tia en las zonas ru­rales con pres­en­cia de bú­fa­los u otro gana­do. Las san­gui­jue­las, por su parte, son bas­tante raras en Palawan.

    Aunque los in­sec­tos no son un prob­le­ma en nave­gación, es ha­bit­u­al sufrir el ataque de mos­qui­tos y je­jenes (fle­bó­to­mos) tam­bién du­rante los vi­a­jes en bar­co, en las playas y manglares en los que se hace es­cala. És­tos serán más abun­dantes cuan­to may­or sea la can­ti­dad de ma­te­ria orgáni­ca en de­scom­posi­ción cer­ca de la oril­la, y más es­pe­sa la veg­etación circundante.

  • FAUNA PELIGROSA

    A pe­sar de ser la may­or pre­ocu­pación para mu­chos vi­a­jeros, este asun­to en re­al­i­dad no merece tan­ta aten­ción como se le pres­ta. Lo creas o no, tienes más prob­a­bil­i­dades de torcerte un to­bil­lo, o in­clu­so de ten­er un ac­ci­dente de trá­fi­co de camino a nue­stro bar­co, que de sufrir un per­cance con al­gún an­i­mal sal­va­je.

    Los grandes depredadores acuáti­cos, como los tiburones y los coco­dri­los, son seres ex­tremada­mente raros, no solo por su posi­ción en lo alto de la ca­de­na al­i­men­ta­ria, sino tam­bién por la per­se­cu­ción a la que se han vis­to someti­dos du­rante sig­los. Si aun así te en­cuen­tras con uno, tra­ta de no com­por­tarte como una pre­sa. Man­tén la cal­ma, per­manece en tu posi­ción y sim­ple­mente es­pera a que siga su camino. A fin de cuen­tas, si se ha de­ja­do ver, prob­a­ble­mente no esté muy in­tere­sa­do en ti. Para el caso con­cre­to de los coco­dri­los, evi­ta las ac­tivi­dades rui­dosas cer­ca de la oril­la en aguas de poca vis­i­bil­i­dad, y nun­ca te ac­erques a uno ni den­tro ni fuera del agua, aun des­de una em­bar­cación, son muy ter­ri­to­ri­ales y pueden lle­gar a embestirte.

    En gen­er­al, será a las criat­uras pe­queñas a quienes de­bamos prestar más aten­ción, lo cual es par­tic­u­lar­mente cier­to en tier­ra en Palawan, donde el may­or depredador ape­nas al­can­za la tal­la de un per­ro me­di­ano. Para to­das el­las, tan­to en tier­ra como en el mar, bas­tará con ve­stir ropa ade­cua­da, vig­i­lar nue­stros pa­sos y seguir una políti­ca es­tric­ta de “no to­car”.

  • MANGA LARGA Y CALZADO ADECUADO

    Aunque pue­da pare­cer una idea ab­sur­da a primera vista, la camisa y el pan­talón largo son la mejor op­ción para mo­verse por la sel­va trop­i­cal. Hay un mil­lón de ra­zones para ello: oru­gas ur­ticantes, ratanes es­pinosos, pan­danos cor­tantes… Una ropa ade­cua­da nos pro­te­gerá no solo del con­tac­to abra­si­vo con el en­torno, sino tam­bién de la pica­du­ra de mos­qui­tos, je­jenes, hormi­gas y san­gui­jue­las. Para es­tos dos úl­ti­mos, será de gran ayu­da ve­stir cal­cetines grue­sos ajus­ta­dos por enci­ma de los pan­talones.

    En el mar, la man­ga larga evi­tará las que­maduras so­lares fuera del agua, y el roce de cubome­dusas y otro planc­ton gelati­noso den­tro de ella. Los es­carpines, por su parte, im­pedirán que nos dañe­mos al cam­i­nar so­bre el ar­recife, y ayu­darán a pre­venir en­cuen­tros in­de­sea­d­os con la fau­na peli­grosa que vive en el fon­do, como los peces piedra, los er­i­zos y las rayas.

  • TOCAR Y AGARRAR

    En el bosque trop­i­cal, evi­ta apo­yarte o col­garte de cuan­to te rodea. Sabe­mos que el ter­reno es com­pli­ca­do y man­ten­er el equi­lib­rio difí­cil. Pero las ra­mas y los tron­cos no serán la solu­ción a tu prob­le­ma. No solo porque puedan es­tar pro­vis­tos de es­pinas, resinas o pe­los ur­ticantes, sino tam­bién por ser el hog­ar de hormi­gas de fuego, ciem­piés, ser­pi­entes y otras tan­tas criat­uras que no te quieres en­con­trar. Mejor no pier­das de vista tus manos, vig­i­la tus pa­sos y echa siem­pre un vis­ta­zo al sue­lo antes de sen­tarte en él. Y cuan­do no es­tés us­an­do tu mochi­la, asegúrate de cer­rar­la bien. Por cier­to, ag­i­tar lianas o ár­boles jóvenes es par­tic­u­lar­mente peli­groso, porque pueden es­con­der panales en su parte alta o es­tar conec­ta­dos a ra­mas po­dri­das que caerían so­bre tu cabeza. Olvi­da ya esa fan­tasía ab­sur­da de ser Tarzán por un día.

    En el mar, muy es­pe­cial­mente, nun­ca debes to­car nada, aunque creas que sabes bien lo que es. Muchas criat­uras mari­nas de as­pec­to in­ofen­si­vo en re­al­i­dad no lo son tan­to. Los corales vivos, por ejem­p­lo, son tan ur­ticantes como las ané­monas y las medusas, e in­clu­so de­spués de muer­tos pueden provo­car heri­das que tien­den a in­fec­tarse do­lorosa­mente. Y es que aquí nada es lo que parece, has­ta un sim­ple pulpo puede lle­gar a ser letal.

    Al nadar y bucear, evi­ta gol­pear el fon­do con los pies, para pro­te­ger tu propia in­te­gri­dad y evi­tar el daño a un ar­recife que habrá re­queri­do cien­tos de años para lle­gar a su es­ta­do actual.

  • LIGEREZA

    Cuan­to más ligero mejor. No nece­si­tas car­gar con mil cosas para dis­fru­tar un poco de la nat­u­raleza. El ex­ce­so de car­ga te más hará tor­pe, lento y rui­doso. No verás nada a tu alrede­dor y te cansarás mu­cho más rápi­do. Te bas­tará con ll­e­var con­ti­go agua en abun­dan­cia, re­pe­lente de in­sec­tos y por supuesto… ¡tus pris­máti­cos y tu cá­mara de fotos!

  • SILENCIO

    La nat­u­raleza solo rev­ela sus se­cre­tos en si­len­cio. En esta parte del mun­do, la vida lit­eral­mente te rodea por to­das partes y solo tienes que dar­le una opor­tu­nidad para mostrarse. Tra­ta de con­tro­lar tus emo­ciones y con­cén­trate, pron­to no­tarás los re­sul­ta­dos. A fin de cuen­tas, no has venido tan lejos para ver solo un puña­do de ho­jas y ramas.

  • AVISTAMIENTOS DE FAUNA

    Aunque re­sulte una ob­viedad debe­mos hac­er hin­capié en este pun­to: los an­i­males sal­va­jes son seres im­pre­deci­bles por nat­u­raleza. Pre­cisa­mente ahí rad­i­ca la ma­gia de los avis­tamien­tos. Así, aunque hare­mos todo cuan­to esté en nues­tra mano para que se pro­duz­can en­cuen­tros, no po­dremos en ningún caso garan­ti­zar­los.

  • RESPETO

    Éste es, sin duda, el con­se­jo más im­por­tante que podemos dar a cualquier vi­a­jero. En esta parte del mun­do, la nat­u­raleza tiene mu­cho que ofre­cer­nos, pero tam­bién mu­cho que ar­rebatarnos. No ven­gas con miedo, solo sé cauteloso y sigue en todo mo­men­to los con­se­jos de tu guía. Y ante la duda, el re­speto y la pre­cau­ción son siem­pre la mejor her­ramien­ta. Sim­ple­mente ven, dis­fru­ta con hu­mil­dad y vuelve a casa sano y sal­vo para contarlo.

Ten siempre en cuenta…
  • MAREOS

    En el mar, las condi­ciones pueden cam­biar de for­ma ráp­i­da e im­pre­vis­i­ble. E in­clu­so con un mar en cal­ma, las per­sonas con poca ex­pe­ri­en­cia en nave­gación pueden marearse fá­cil­mente. No lo de­jes al azar, trae PÍL­DO­RAS CON­TRA EL MAREO a cualquier vi­a­je en bar­co.

  • RADIACIÓN SOLAR

    Aunque nue­stro bar­co está pro­vis­to de lonas de som­breo, debes pro­te­gerte del sol en todo mo­men­to uti­lizan­do CRE­MA SO­LAR, SOM­BRERO Y MAN­GA LARGA. En el trópi­co, la ra­diación in­cide muy ver­ti­cal­mente so­bre la su­per­fi­cie ter­restre y puede causar im­por­tantes que­maduras en ape­nas unos min­u­tos de exposición.

  • HIDRATACIÓN

    El agua es siem­pre la mejor in­ver­sión que puedes hac­er. Ll­e­va con­ti­go tan­ta agua como sea posi­ble, en detri­men­to de co­mi­da u otros tipos de car­ga. El ham­bre re­sul­ta mo­les­ta, sí, pero la deshidrat­ación puede lle­gar a matar en cuestión de min­u­tos. Si aun así quieres ll­e­var con­ti­go algo de co­mi­da du­rante el vi­a­je, elige pref­er­ente­mente al­i­men­tos pe­queños y al­ta­mente calóri­cos (p. ej. fru­tos sec­os y bar­ri­tas energéticas).

  • MOJARSE

    Acep­té­moslo, no hay lu­gar para el con­fort y la se­quedad en el tópi­co, di­gan lo que di­gan los fab­ri­cantes de ropa de­porti­va. Aunque no llue­va, tu ropa y calza­do es­tarán siem­pre mo­ja­dos, ya sea por la humedad del en­torno o por tu pro­pio su­dor. Con­cen­tra tus es­fuer­zos en man­ten­er la mochi­la seca y mejor deja el chubas­quero en casa, a menos que quieras su­dar el doble y quedar en­gan­cha­do por doquier.

    En el bar­co, es­tar mo­ja­do será tam­bién tu es­ta­do ha­bit­u­al. Se­gu­ra­mente irás zam­bul­lén­dote a cada paso, sin tiem­po para se­carte en­tre una para­da y otra, y ten­drás que lidiar además con la salpica­du­ra de las olas du­rante la nave­gación. No sería ex­traño, de he­cho, que lle­gas­es a sen­tir frío con la brisa al nave­g­ar. Por eso tu mejor op­ción será ve­stir pren­das lig­eras de li­cra, a ser posi­ble de las dis­eñadas es­pecí­fi­ca­mente para prac­ticar de­portes náu­ti­cos. Tam­bién ayu­dará ir pro­vis­to de es­carpines y toal­la.

  • ALERGIAS

    Las aler­gias de­bidas al polen son raras en el trópi­co húme­do, por la alta di­ver­si­dad y baja abun­dan­cia rel­a­ti­va de cada es­pecie par­tic­u­lar de plan­ta. Las plan­tas trop­i­cales, además, han evolu­ciona­do en su may­oría para ser polin­izadas por in­sec­tos u otros an­i­males, y rara vez re­cur­ren al vien­to como ­medio de dispersión.

    Las aler­gias cutáneas y las rela­cionadas con las pica­duras de in­sec­tos son sin em­bar­go de lo más ha­bit­u­al. De he­cho, si eres alér­gi­co a las abe­jas o las avis­pas quizá no sea mala idea vi­a­jar con tu pro­pio in­yectable de epine­f­rina. Y claro está, en am­bos ca­sos la man­ga larga será de gran ayuda.

    Ex­iste tam­bién el ries­go de sufrir al­gu­na aler­gia al­i­men­ta­ria o in­tol­er­an­cia a los al­i­men­tos que servi­mos du­rante las ac­tivi­dades. Por fa­vor, in­fór­manos lo antes posi­ble de cualquier ALER­GIA O RE­QUER­IM­IEN­TO AL­I­MEN­TI­CIO ES­PE­CIAL que puedas ten­er, in­clu­i­dos los rela­ciona­dos con tu cre­do o religión.

  • MOSQUITOS Y SIMILARES

    ¿Ti­gres? ¿Ser­pi­entes? Mejor pre­ocú­pate por los mos­qui­tos, no en vano son con­sid­er­a­dos el an­i­mal más mortífero de la tier­ra. La malar­ia, el dengue y otras en­fer­medades trans­mi­ti­das por in­sec­tos son aún endémi­cas en Palawan. Para la malar­ia, la pro­fi­lax­is quími­ca puede ser de gran ayu­da, y en to­dos los ca­sos lo será la ropa de man­ga larga, el re­pe­lente de in­sec­tos (de cal­i­dad) y, fun­da­men­tal­mente, el refu­gio en las ho­ras de may­or ac­tivi­dad (alba y ocaso).

    Los tábanos pueden lle­gar a ser una mo­les­tia en las zonas ru­rales con pres­en­cia de bú­fa­los u otro gana­do. Las san­gui­jue­las, por su parte, son bas­tante raras en Palawan.

    Aunque los in­sec­tos no son un prob­le­ma en nave­gación, es ha­bit­u­al sufrir el ataque de mos­qui­tos y je­jenes (fle­bó­to­mos) tam­bién du­rante los vi­a­jes en bar­co, en las playas y manglares en los que se hace es­cala. És­tos serán más abun­dantes cuan­to may­or sea la can­ti­dad de ma­te­ria orgáni­ca en de­scom­posi­ción cer­ca de la oril­la, y más es­pe­sa la veg­etación circundante.

  • FAUNA PELIGROSA

    A pe­sar de ser la may­or pre­ocu­pación para mu­chos vi­a­jeros, este asun­to en re­al­i­dad no merece tan­ta aten­ción como se le pres­ta. Lo creas o no, tienes más prob­a­bil­i­dades de torcerte un to­bil­lo, o in­clu­so de ten­er un ac­ci­dente de trá­fi­co de camino a nue­stro bar­co, que de sufrir un per­cance con al­gún an­i­mal sal­va­je.

    Los grandes depredadores acuáti­cos, como los tiburones y los coco­dri­los, son seres ex­tremada­mente raros, no solo por su posi­ción en lo alto de la ca­de­na al­i­men­ta­ria, sino tam­bién por la per­se­cu­ción a la que se han vis­to someti­dos du­rante sig­los. Si aun así te en­cuen­tras con uno, tra­ta de no com­por­tarte como una pre­sa. Man­tén la cal­ma, per­manece en tu posi­ción y sim­ple­mente es­pera a que siga su camino. A fin de cuen­tas, si se ha de­ja­do ver, prob­a­ble­mente no esté muy in­tere­sa­do en ti. Para el caso con­cre­to de los coco­dri­los, evi­ta las ac­tivi­dades rui­dosas cer­ca de la oril­la en aguas de poca vis­i­bil­i­dad, y nun­ca te ac­erques a uno ni den­tro ni fuera del agua, aun des­de una em­bar­cación, son muy ter­ri­to­ri­ales y pueden lle­gar a embestirte.

    En gen­er­al, será a las criat­uras pe­queñas a quienes de­bamos prestar más aten­ción, lo cual es par­tic­u­lar­mente cier­to en tier­ra en Palawan, donde el may­or depredador ape­nas al­can­za la tal­la de un per­ro me­di­ano. Para to­das el­las, tan­to en tier­ra como en el mar, bas­tará con ve­stir ropa ade­cua­da, vig­i­lar nue­stros pa­sos y seguir una políti­ca es­tric­ta de “no to­car”.

  • MANGA LARGA Y CALZADO ADECUADO

    Aunque pue­da pare­cer una idea ab­sur­da a primera vista, la camisa y el pan­talón largo son la mejor op­ción para mo­verse por la sel­va trop­i­cal. Hay un mil­lón de ra­zones para ello: oru­gas ur­ticantes, ratanes es­pinosos, pan­danos cor­tantes… Una ropa ade­cua­da nos pro­te­gerá no solo del con­tac­to abra­si­vo con el en­torno, sino tam­bién de la pica­du­ra de mos­qui­tos, je­jenes, hormi­gas y san­gui­jue­las. Para es­tos dos úl­ti­mos, será de gran ayu­da ve­stir cal­cetines grue­sos ajus­ta­dos por enci­ma de los pan­talones.

    En el mar, la man­ga larga evi­tará las que­maduras so­lares fuera del agua, y el roce de cubome­dusas y otro planc­ton gelati­noso den­tro de ella. Los es­carpines, por su parte, im­pedirán que nos dañe­mos al cam­i­nar so­bre el ar­recife, y ayu­darán a pre­venir en­cuen­tros in­de­sea­d­os con la fau­na peli­grosa que vive en el fon­do, como los peces piedra, los er­i­zos y las rayas.

  • TOCAR Y AGARRAR

    En el bosque trop­i­cal, evi­ta apo­yarte o col­garte de cuan­to te rodea. Sabe­mos que el ter­reno es com­pli­ca­do y man­ten­er el equi­lib­rio difí­cil. Pero las ra­mas y los tron­cos no serán la solu­ción a tu prob­le­ma. No solo porque puedan es­tar pro­vis­tos de es­pinas, resinas o pe­los ur­ticantes, sino tam­bién por ser el hog­ar de hormi­gas de fuego, ciem­piés, ser­pi­entes y otras tan­tas criat­uras que no te quieres en­con­trar. Mejor no pier­das de vista tus manos, vig­i­la tus pa­sos y echa siem­pre un vis­ta­zo al sue­lo antes de sen­tarte en él. Y cuan­do no es­tés us­an­do tu mochi­la, asegúrate de cer­rar­la bien. Por cier­to, ag­i­tar lianas o ár­boles jóvenes es par­tic­u­lar­mente peli­groso, porque pueden es­con­der panales en su parte alta o es­tar conec­ta­dos a ra­mas po­dri­das que caerían so­bre tu cabeza. Olvi­da ya esa fan­tasía ab­sur­da de ser Tarzán por un día.

    En el mar, muy es­pe­cial­mente, nun­ca debes to­car nada, aunque creas que sabes bien lo que es. Muchas criat­uras mari­nas de as­pec­to in­ofen­si­vo en re­al­i­dad no lo son tan­to. Los corales vivos, por ejem­p­lo, son tan ur­ticantes como las ané­monas y las medusas, e in­clu­so de­spués de muer­tos pueden provo­car heri­das que tien­den a in­fec­tarse do­lorosa­mente. Y es que aquí nada es lo que parece, has­ta un sim­ple pulpo puede lle­gar a ser letal.

    Al nadar y bucear, evi­ta gol­pear el fon­do con los pies, para pro­te­ger tu propia in­te­gri­dad y evi­tar el daño a un ar­recife que habrá re­queri­do cien­tos de años para lle­gar a su es­ta­do actual.

  • LIGEREZA

    Cuan­to más ligero mejor. No nece­si­tas car­gar con mil cosas para dis­fru­tar un poco de la nat­u­raleza. El ex­ce­so de car­ga te más hará tor­pe, lento y rui­doso. No verás nada a tu alrede­dor y te cansarás mu­cho más rápi­do. Te bas­tará con ll­e­var con­ti­go agua en abun­dan­cia, re­pe­lente de in­sec­tos y por supuesto… ¡tus pris­máti­cos y tu cá­mara de fotos!

  • SILENCIO

    La nat­u­raleza solo rev­ela sus se­cre­tos en si­len­cio. En esta parte del mun­do, la vida lit­eral­mente te rodea por to­das partes y solo tienes que dar­le una opor­tu­nidad para mostrarse. Tra­ta de con­tro­lar tus emo­ciones y con­cén­trate, pron­to no­tarás los re­sul­ta­dos. A fin de cuen­tas, no has venido tan lejos para ver solo un puña­do de ho­jas y ramas.

  • AVISTAMIENTOS DE FAUNA

    Aunque re­sulte una ob­viedad debe­mos hac­er hin­capié en este pun­to: los an­i­males sal­va­jes son seres im­pre­deci­bles por nat­u­raleza. Pre­cisa­mente ahí rad­i­ca la ma­gia de los avis­tamien­tos. Así, aunque hare­mos todo cuan­to esté en nues­tra mano para que se pro­duz­can en­cuen­tros, no po­dremos en ningún caso garan­ti­zar­los.

  • RESPETO

    Éste es, sin duda, el con­se­jo más im­por­tante que podemos dar a cualquier vi­a­jero. En esta parte del mun­do, la nat­u­raleza tiene mu­cho que ofre­cer­nos, pero tam­bién mu­cho que ar­rebatarnos. No ven­gas con miedo, solo sé cauteloso y sigue en todo mo­men­to los con­se­jos de tu guía. Y ante la duda, el re­speto y la pre­cau­ción son siem­pre la mejor her­ramien­ta. Sim­ple­mente ven, dis­fru­ta con hu­mil­dad y vuelve a casa sano y sal­vo para contarlo.